Capítulo 11
Testimonio de Juan el Bautista
11:1 Este es el testimonio de Juan, cuando los judíos Ya desde mucho tiempo atrás, muchos de los judíos sacerdotes y levitas entre otros muchos, se habían corrompido de tal manera que no aceptaban que alguien más les dijera lo que tenían que hacer.
En otras palabras, nunca aceptaron a Jesús como el Mesías profetizado en las mismas escrituras que ellos leían.
Así de la misma forma como muchos en nuestros días, siguen practicando actividades que la Biblia rechaza.
Así que, era el tiempo correcto para introducir el nuevo pacto.
enviaron de Jerusalén sacerdotes, fariseos y levitas para que le preguntasen: Tú, ¿quién eres?
11:2 Porque el pueblo estaba en expectativa, preguntándose en sus corazones si acaso Juan sería el Cristo.
11:3 Pero Juan no lo negó y les dijo: Yo no soy el Cristo Desde mucho tiempo, atrás la venida de Jesús ya había sido profetizada, y muchos ya la esperaban en esos días, por lo que estaban en expectativa. .
11:4 Y le preguntaron: ¿Eres tú Elías o algún otro profeta? Y dijo: No.
11:5 Le dijeron: ¿Pues quién eres? para que demos respuesta a los que nos enviaron. ¿Qué dices de ti mismo? ¿Por qué, pues, bautizas? En ese tiempo solo algunos podían bautizar, por esa razón le preguntaron.
Lo que no sabían era que Juan con autorización de Dios Altísimo, estaba iniciando el nuevo pacto, o la nueva doctrina del evangelio o buenas nuevas la cual activaríamos por fe.
Así que después del nuevo pacto, lo pueden hacer libremente en agua y en el nombre de Jesucristo, todos los que confían en Él, y obedecen su doctrina o principios establecidos.
si no eres el Cristo, ni Elías, ni el profeta.
11:6 Respondió Juan, diciendo: Yo soy la voz de uno que exhorta a las almas solas y atribuladas por sus pecados, para que enderecen sus caminos delante de Dios Altísimo, como lo dijo el profeta Isaías.
11:7 Yo los bautizo en agua Dos bautismos diferentes. Juan solo bautizaba “en agua”
Jesús en Poder y Verdad. Cuando Jesús fue bautizado en agua por Juan, fundió las dos formas de bautismo en una sola.
“en agua, y con el Espíritu de Poder y Verdad”
Y eso mismo se cumple, cuando una persona es bautizada después de aceptar por fe a Jesús.
después de su arrepentimiento; pero el que viene tras mí, cuyo calzado no soy digno de llevar, ya está en medio de ustedes, pero no lo conocen.
11:8 Él es más poderoso que yo, y los bautizará en Espíritu de Poder y Verdad Ser bautizados, es el testimonio público de nuestro arrepentimiento, de que aceptamos vivir una nueva vida, y de que el Espíritu de Poder y Verdad estará con nosotros en todo momento para alentarnos y darnos fuerza para continuar en las adversidades de la vida. Y no se limita a una sola reacción, sino que cada quien reaccionará diferente, y lo demostrará en sus acciones diarias.
11:9 El poder está en su mano, limpiará el campo, recogerá el trigo en el granero, y quemará la paja en fuego que nunca se apagará.
11:10 Y anunciaba con estas y otras muchas exhortaciones, las buenas nuevas De acuerdo a esta declaración, entendemos que Judea, o por lo menos el lugar donde se realizó la fiesta, estaba en la parte más alta que Samaria y Galilea. al pueblo.
11:11 Estas cosas sucedieron en Betábara, al otro lado del Jordán, donde Juan estaba bautizando.

Jesús Hace Público su Ministerio
11:12 Y volvió Jesús guiado por el Espíritu de Poder y Verdad Jesucristo estaba investido por el Espíritu de Poder y Verdad, y siempre aprovechaba cualquier ocasión para desempeñar su ministerio. Pero oficialmente, lo hizo público a los 30 años de edad, mostrándonos como realizar las cosas para que tomáramos ejemplo de cómo hacerlo nosotros en el futuro. a Galilea, seguido por muchos de sus discípulos No dice cuantos, ni quiénes eran los discípulos. .
11:13 Y se difundió su fama por toda la tierra de alrededor, y enseñaba en las sinagogas de ellos, y era admirado y glorificado por todos.
11:14 Y predicando, comenzó a decir: El tiempo se ha cumplido, el reino de los cielos se ha acercado; arrepiéntanse, y crean en el evangelio “Arrepiéntanse, y crean en el evangelio”
Estas dos palabras mencionadas por Jesucristo, son básicas, claras e importantísimas, pues nos muestra lo que debemos hacer y creer, para poder lograr la tranquilidad espiritual o paz interior.
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11:15 Y pasando por Nazaret, donde se había criado; habitó en Capernaum, ciudad marítima, en la región de Zabulón y de Neftalí.
11:16 Y se cumplió lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo: Tierra de Zabulón y tierra de Neftalí; Camino del mar, al otro lado del Jordán; Galilea de los gentiles; El pueblo asentado en tinieblas vio gran luz; Y a los asentados en región de sombra de muerte; Luz les resplandeció.
11:17 Y llegado el día de reposo, comenzó a enseñar en la sinagoga; conforme a la costumbre Costumbre o tradición.
Hasta este momento Jesucristo todavía respetaba la ley y sus ritos o costumbres.
Pero una vez que hizo público su ministerio y nos mostró el nuevo pacto, todo cambió.
Lo viejo quedó atrás, para dar paso a lo nuevo.
, y se levantó a leer.
11:18 Y se le dio el libro del profeta Isaías; y abriéndolo, leyó lo siguiente.
11:19 El Espíritu del Señor está sobre mí Estos dos versos nos declaran claramente cuál fue la misión de Jesucristo al estar entre nosotros.
Y también nos señala que solo aquellos apartados, dedicados y sobre quienes este el Espíritu de Poder y verdad, están autorizados para hacerlo.
. Por cuanto me ha ungido Una pregunta muy importante.
¿Para que fuiste ungido?
para dar buenas nuevas a las almas angustiadas.
11:20 Me ha enviado a sanar a los quebrantados Estos versos encierran la labor o ministerio de Jesucristo, y la presentó para todos aquellos “pobres y humildes” que estuvieran dispuesto a adoptarla por fe.
Les llamó así simbólicamente, refiriéndose a su interior no a su exterior, corroborándolo con las frases “sanar a los quebrantados de corazón, libertad a los oprimidos”
Estamos viviendo el año agradable de Dios Altísimo, pues nos ha ofrecido por medio de Jesucristo, una nueva oportunidad de rehacer nuestra vida.
Y todo es explicado de una forma sencilla, para que lo entendamos mejor, y no haya malinterpretaciones.
de corazón; a pregonar y abogar por libertad a los cautivos, dar vista a los ciegos; a poner en libertad a los oprimidos, y a predicar el año agradable del Señor.
11:21 Y enrollando el libro, lo dio al ministro, se sentó; y los ojos de todos en la sinagoga, estaban fijos en él.

Jesús Adopta el Nombre de Jesucristo al Darse a Conocer
11:22 Y comenzó a decirles: Hoy se ha cumplido esta Escritura ante todos ustedes Todos los presentes fueron testigos del cumplimiento de las profecías escritas.
Así que, les dijo Jesucristo, no hay excusa para que digan “yo no sabía” de hoy en adelante; hago público mi ministerio, y la razón por la cual estoy entre ustedes, lo cual ya les expliqué claramente.
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11:23 Y oyéndole todos, se admiraban y daban buen testimonio de Él.
11:24Y estaban maravillados de las palabras de gracia que salían de su boca y decían: ¿De dónde tiene estas cosas? ¿Y qué sabiduría es esta que le es dada, y estos milagros que por sus manos son hechos?
11:25 ¿No es éste el carpintero, hijo de José y María, hermano de Jacobo, de José, de Judas y de Simón? ¿No están también aquí con nosotros sus hermanas? Y se escandalizaban de Él.
11:26 Más Jesucristo les dijo: Sin duda me diréis este refrán: Médico, cúrate a ti mismo; de tantas cosas Cuando Jesús hizo público su ministerio, ya tenía tiempo ministrando, haciendo milagros y ayudando a la gente, pero no hay registro de todo eso. que hemos oído que se han hecho en Capernaum, haz también aquí en tu tierra.
11:27 Y añadió: De cierto os digo, que ningún profeta es aceptado en su propia tierra, parientes, o casa.
11:28 Y en verdad os digo, que muchas viudas había en los días de Elías, cuando el cielo fue cerrado por tres años y seis meses La bendición de Dios Altísimo se detuvo por un tiempo, y ni así recapacita apropiadamente el ser humano. , y hubo una gran hambre en toda la tierra; pero a ninguna de ellas Esta enseñanza de la viuda y los leprosos, es para indicarnos que el evangelio no es para todos; sino solo para los valientes que, por fe, creen, y se arrepienten honestamente, buscando una mejor vida moral, que es exactamente lo que Dios Altísimo a través de Jesucristo nos ofrece. fue enviado Elías, sino a una mujer viuda en Sarepta de Sidón.
11:29 Y muchos leprosos había en tiempo del profeta Eliseo; pero ninguno de ellos fue limpiado, sino Naamán el sirio.
11:30 Y no pudo hacer allí ningún milagro, salvo que sanó a unos pocos enfermos, poniendo sobre ellos las manos.
11:31 Y estaba asombrado de la incredulidad de ellos.
11:32 Al oír estas cosas, todos en la sinagoga se llenaron de ira; y levantándose, lo empujaron hacia afuera, y le llevaron hasta la cumbre del monte sobre el cual estaba edificado el pueblo de ellos, y querían despeñarle, pero pasando por en medio de todos, se fue.