Capítulo 4
Nacimiento de Juan el Bautista
4:1 Y al oír los vecinos y familiares que Dios Altísimo había engrandecido para con Elisabet su misericordia, se regocijaron.
4:2 Y llegando el octavo día Esta ceremonia que celebraron en el octavo día,
no era para presentar al niño delante de Dios Altísimo, sino para circuncidarlo y ponerle nombre, conforme la ley lo indicaba.
No era sábado como séptimo día, ni domingo como primer día, le llamaban el octavo día, pues el pueblo de Dios Altísimo, así los contaba en ese tiempo.
No usaban nombres. vinieron para circuncidar al niño; y le llamaban Zacarías como su padre.
4:3 Pero respondiendo su madre, dijo: No; se llamará Indiscutiblemente fueron obedientes a las indicaciones que recibieron. Juan.
4:4 Y al oír esto los presentes preguntaron ¿Por qué? No hay nadie en tu parentela con ese nombre.
4:5 Entonces preguntaron por señas a su padre, cómo le quería llamar.
4:6 Y pidiendo una tablilla, escribió, diciendo: Juan es su nombre.
4:7 Y todos se maravillaron porque no sabían lo que sucedía.
4:8 Pero al momento de cumplirse la profecía, fue abierta su boca y suelta su lengua Aquí en este verso tenemos una enseñanza maravillosa, que podemos adaptar a nuestra vida diaria.
Es muy probable que no salgas de un sufrimiento que estás pasando porque no has obedecido con humildad las indicaciones como se te dieron.
Cuando lo hagas, se cumplirá la profecía en ti, y por fin serás libre de tu azote. , y agradeció Zacarías a Dios Altísimo, y platicó a todos lo que había pasado.
Profecía de Zacarías sobre Juan
4:9 Y habló Zacarías diciendo sobre Juan; tú, niño, profeta de Dios Altísimo serás llamado; Porque irás delante de la presencia del Señor Jesucristo, para preparar sus caminos; Para dar conocimiento de salvación a su puebloEl mensaje de salvación que ofrecieron Juan y Jesucristo, inició en estas regiones y sus alrededores, que es en donde ellos nacieron.
Por eso dice “a su pueblo”
Ellos expusieron el mensaje, y la gente que lo aceptó por fe, se integraron al “pueblo” o gran familia de Dios Altísimo, a la cual ellos representaron.
Después de ahí, se expandió por todo el mundo., para perdón de sus pecados, por la entrañable misericordia Estos versos encierran el secreto de lo que significa “salvación” “ser libre, o liberado” de lo que interiormente nos aprisionaba.
Y nos muestra la misericordia de Dios Altísimo,
al enseñarnos por medio de Jesucristo,
el camino para librarnos de la terrible angustia que nos provocaba, pensar que no podíamos escapar de los errores cometidos “pecados” en nuestra vida.
Las enseñanzas de Jesucristo (doctrina) nos hizo pasar, de las tinieblas a la luz, de la muerte a la vida, de los conflictos a la paz, y de vivir en una nueva familia. de nuestro Dios Altísimo, con que nos visitóEllos no veían ninguna diferencia entre un Ser Celestial, o un Varón que los visitaba desde los cielos (aurora) a todos les llamaban, nuestro “Dios que nos visitó, El Altísimo, o El Eterno”. Tenían en estos tiempos, una forma de expresarse un poco diferente y compleja. desde los cielos.
4:10 Y se llenaron de temor todos sus vecinos, y en todas las montañas de Judea Judea es área montañosa, así que ellos vivían entre los cerros. se divulgaron estas cosas, y todos los que las oían las guardaban en su corazón, preguntándose uno a otro.
4:11 ¿Quién, pues, será este niño?
4:12 Y la mano del Señor Dios Altísimo siempre estuvo con Juan, y muchos fueron liberados por la gran labor que realizó. Todopoderoso creador del cielo y de la tierra, estaba con él.
Profecía de Zacarías sobre Jesús
4:13 Y Zacarías padre de Juan, lleno del Espíritu de Poder y Verdad Zacarías no se exhibió, ni hizo escándalo, al ser lleno del Espíritu de Poder y Verdad.
Solo hizo lo que tenía que hacer. , profetizó diciendo: Bendito Dios Altísimo, Señor de IsraelLa expresión de Zacarías al decir “Señor de Israel” era refiriéndose a la descendencia de Abraham, Isaac y Jacob quienes creyeron, obedecieron y fueron los pioneros de la fe.
No se refería a una nación de nombre Israel de ninguna manera, pues no existía.
Además, Jesucristo por medio del nuevo pacto, hizo de dos pueblos uno, redimiéndonos, uniéndonos y librándonos de nuestras angustias y pesares, e iniciando de esa forma, lo que hoy conocemos como cristianismo, el cual se resume a un solo pueblo instituido por fe, y que no tiene una patria en este mundo sino en el cielo.
Somos una nación universal, pues por la fe estamos en todo el mundo., que ha visitado y redimido a su pueblo, y nos levantó un poderoso Salvador en la casa de David Al decir “casa de David” se refiere a la descendencia de donde viene Jesús. su siervo.
4:14 Para dar luz a los que habitan en tinieblas En estos versos se encuentra revelado el misterio o punto clave del evangelio.
Jesucristo nos hizo pasar de las tinieblas a la luz,
de la muerte a la vida, y de los conflictos a la paz.
ÉL nos defendió, y lo hizo hasta la muerte, de la misma forma como lo hicieron los líderes y profetas de la antigüedad.
Tengan cuidado con los líderes deshonestos, que solo buscan engañarlos para obtener ganancias materiales. y en sombra de muerte; Para encaminar nuestros pies por camino de paz.
4:15 Así como habló por boca de los profetas redimidos, quienes fueron desde el principio; Salvación de nuestros enemigos En estos tiempos la tarea de un profeta o líder entregado a Dios Altísimo, no era solo de hablar al pueblo que obedecía, sino también de defenderlos de acuerdo a sus capacidades, de los malvados, y de todos los que los aborrecían, para que libres de todos ellos, pudieran trabajar y servir sin impedimentos. , y de todos los que nos aborrecían.
4:16 Se acordó y tubo misericordia de nuestros padres, y del pacto solemne Abraham fue el pionero de la fe.
La promesa eterna que se le hizo a Abraham fue doble, tendría tierra y muchos hijos físicos por heredad, de los cuales saldrían muchas naciones. Pero lo más importante es entender, que la promesa eterna que Dios Altísimo le estaba haciendo, es la promesa que Jesucristo retomaría y la llevaría a su cumplimiento.
Nos llamaría hijos de Dios Altísimo, y conquistaría una patria celestial por fe para todos los que obedecieran. que hizo a Abraham, que un día había de concedernos La profecía se estaba cumpliendo, y Dios Altísimo estaba concediendo finalmente que los seres humanos vivieran tranquilos emocionalmente por medio de la fe, la cual Jesús nos mostraría como alcanzarla. , ser libres de nuestros enemigos, y servirle con honestidad, justicia, sin temor y en paz Este es el propósito de Dios Altísimo para el hombre, y la forma de vida que quiere para los redimidos.
Que vivan en honestidad y justicia, sin temor y en paz.
Eso no significa que nunca tendremos dificultades.
Pero si no obedecemos, simplemente no seremos pueblo de Dios Altísimo.
Y todos los que se esfuerzan por obedecer,
es porque han entendido muy bien cuál es el propósito de las enseñanzas de Jesucristo. todos nuestros días.